La torre sigue ahi llena de luz, viendo como las historias se cuentan....
El viejito de Akasaka sonriente como siempre no para de decir bonjour y atender las siete mesas que hacen mi restaurante favorito....
Passy no cambia,, hasta la vecina de 60 años con su pequeño perro sigue saliendo todos los dias y a la misma hora a comprar su baguette....
Es mi mundo paralelo que pareciera estar esperando a que me decida si volver a escribir mi historia en las vias del metro o no.... solo que entre los regalos de esta cotidianeidad atrapada en el otro lado del océano no esta mi certeza ( como si de verdad supiera donde esta....,, el descubrimiento es el camino al que nunca llegamos)..
Entre todos estos dias de paz.... no he encontrado los momentos para sentarme a escribir ni tampoco he podido mas que dejarme sorprender por el cumulo de sorpresas que se dejan venir ....no cabe duda que cuando uno cosecha afectos,, los frutos siempre saben..
La ciudad de la luz no me deja dormir,, el hambre de vivirla como si no fuera a regresar en mucho tiempo me hace no descansar y la verdad no quiero. Me pierdo consciente en la masa y la disfruto.. Le robo al dia a dia esos pedazos de amor,, de hartazgo que disfruto,, de belleza de cada calle,, de cada quien..
Y solo asi... porque no hay motivo para no hacerlo,, vivo y me dejo conmover por todo aquello que me toca.... y que pienso.... te pienso.
Cuanto tiempo se nos va tratando de llegar a ese lugar donde probablemente nunca lleguemos? Cuanta gente esta aqui todo el dia,, todos los dias,, y no hace mas que rondar nuestra palabra y acto sin significar..
Y asi de pronto llega algo o alguien,, que por el simple hecho de voltear el pensamiento hacia acà,, hace que el dia valga la pena.
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